El langostino Peneaus Kerathurus, si es de Chipiona, y Melicertus Kerathurus, si es de Sanlúcar de Barrameda, posee un cuerpo alargado, comprimido lateralmente, abdomen desarrollado con caparazón semiduro, cola alargada y caracterizada por su colorido, así como una espina o rostro aquillado y aplastado lateralmente.
Este langostino puede llegar a una longitud máxima 22 a 23 centímetros (en este caso se les llama Pablo Romero). Sus tonalidades es rosáceo-amarronado, atravesados lateralmente por franjas oscuras. Su hábitat se encuentra exclusivamente en la Bahía de Cádiz y mas concretamente en la desembocadura del río Guadalquivir (Sanlúcar de Barrameda y Chipiona). Animal de costumbres nocturnas, pasa la mayor parte del día enterrado en la arena de las playas y desembocaduras de ríos con profundidades entre 2 y 50 metros. Es muy cotizado y hoy en día tiene denominación de origen.